martes, 1 de enero de 2008

DESPIDIENDO 2007 ENTRE CENIZAS

¡Feliz 2008!

Pues sí, las dos últimas noches del 2007 las pasamos entre cenizas, y es que estas navidades, en vez de empacharnos de turrón nos vamos a empachar de Cenerentolas. Primero la del Covent Garden, y ahora las del Liceu y de la Ópera de Zurich.

El día 30 pudimos ver en directo la tercera función del que seguramente sea uno de los títulos de la temporada en Barcelona. Disfrutamos como enanos, con dos protagonistas redondos. Como ya Ximo, al que conocí junto a Federico unos minutos antes de entrar a la sala, o Mei han hablado bastante de esta Cenerentola (elegantísima Joyce di Donato, "astral" Juan Diego -como decía Paco-, y menos brillantes los demás) me centraré en la del día 31... Por cierto, que la idea de que Cenerentola lo sueñe todo al final me parece un poco paja mental.

Por fin cumplíamos el sueño de ver en escena una Cenerentola con Cecilia Bartoli, ¡formulado hace más de quince años!, y es que por una razón u otra, nunca habíamos podido ir a Zurich a alguna de las reposiciones del título que se han hecho ultimamente. Ni el frío ni la fecha nos iban a echar atrás esta vez, y con las uvas en la maleta, nos fuimos a Suiza.

Lo primero que hicimos tras almorzar fue ir directos al teatro, para quedar tranquilos de que no hubiese cambios de última hora; y allí estaba el cartel, confirmando que la Bartoli cantaba esa noche. Sin embargo, su novio Oliver Widmer estaba resfriado y no podría interpretar a Dandini. Mal menor, sí, pero habría tenido morbo ver a los dos en escena. Además el sustituto, José Fardilha, no era para tirar cohetes. En fin, después de comprar trufas en Sprungli (visita obligada, obviamente) y descansar un poco, nos esperaba -por tercera vez ya- "La Cenerentola".

Sí,definitivamente fue mejor dejar a Cecilia para el final, porque en este papel rival no tiene ni de cerca. Es suyo. Hace poco escuché en un documental decir a Mirella Freni que cuando se conoce el papel hasta la última nota, es mucho más fácil lanzarse sin red, y fue eso lo que hizo Bartoli anoche. Además se la veía disfrutar, reirse, participar de las bromas, etc, etc. Atenta hasta la última coma del último recitativo, con una línea deliciosa, matizando cada frase, coloreándola... Al final de la noche, el director de la Opernhaus Alexander Pereira salió a escena para felicitar el año, y se arrodilló ante ella. Un gesto que provocó el rugido de todo el teatro. Zurich la considera suya, no hay duda, es su casa.


A su lado brilló Carlos Chausson, mágnifico Magnifico, un actor cómico de primera y mejor cantante. Menuda interpretación. Otro que sabía lo que hacía, y un día así iba a divertirse además de trabajar, si no, escuchad esta morcilla al final del primer acto:


Antonino Siragusa no lo hizo mal, muy por encima de la media según mi opinión, pero claro, teniendo a Flórez tan reciente en la cabeza, pues no hay color. Maratón rossiniana la de este tenor, pues dos días antes estaba cantando Almaviva en la ópera de Viena, y a principios de mes Uberto de "La Donna del Lago" en Berlín. Lo peor, con diferencia, fue László Polgár como Alidoro. Si yo fuera él, me plantearía la jubilación seriamente.
La puesta en escena me gustó bastante, y mucho más el trabajo de actores. También la dirección musical de Ion Marin me pareció más redonda que la de Patrick Summers en el Liceu. Tuvo más chispa, jugó más con las dinámicas y atendió mejor a los cantantes.

¡Ah! y todo un detallazo del teatro el regalarnos champán al final. Centenas de copas esperándonos a la salida de la sala ¡y de cristal! Qué estupendo recuerdo, oye.

4 comentarios:

Parsifal dijo...

Envidia cochina...Feliz Año Nuevo!!!! Con muchos viajes, mucha opera, mucho amor, mucho dinero, mucha alegria...

Mei dijo...

Espero qaue tanta ceniza te evite el carbón para 2008... ;-)

Estupenda manera de acabar el año, Coco, escuchar a la Bartoli cantando ópera sobre un escenario es un privilegio...

PS: Saludos a Luis... :-P
PPS: Me uno a los deseos de Parsifal...

Anónimo dijo...

Podías colgar [i]"un soave non so che"[/i]... Por no hablar de mandar alguna copia a Baldyland...

Besitos,

Justin

Anónimo dijo...

Magnífica reseña! Yo vi los dos repartos de la Cenerentola del Liceu.. ambos magníficos, aunque como siempre, había cantantes mejores y otros más normalitos....
Un saludo, y sigue cuidando el blog así de bien!!!
Carol